Hace dos años...

... entré a trabajar en la oficina, una mañana con el cielo gris, cuando aún no había casi nadie. Un compañero me lo dijo: "parece que los de ETA han puesto una bomba en Atocha, y por lo visto hay heridos". A partir de ahí todo lo demás. No recuerdo si fue Silvia la primera persona que se puso en contacto conmigo, con un sms, preguntando si todo bien, pero desde luego madrugó mucho. Por entonces, claro, ella no sabía que había perdido a su primo. Recuerdo el día siguiente. Nadie parecía querer coger el cercanías ni el metro, y ese viernes con lluvia hubo más gente que nadie en la M-30, volviendo a casa. Recuerdo un gran atasco por la zona de Moncloa. Pero nadie trataba de meterse en tu carril, ni se oía un claxon como suele ser normal. Solo silencio y veias a la gente en los coches, igual que tu, escuchando la radio. Aquella tarde hablé por teléfono con Lolo, el novio de Sil. Estaban de hospital en hospital buscando a Dani, pero por entonces ya se temían lo peor. Luego por la tarde la manifestación... allí si que hubo más de un millón de personas. No pude llegar a la Castellana desde Génova porque no se podía físicamente. Bajé en paralelo por Alonso Martinez, hacia Barquillo y hasta el Banco de España y allí a 300 metros de la Cibeles tampoco pude llegar, había más gente aún. Recuerdo el lunes, el funeral en la universidad por 7 chicos y chicas, Dani entre ellos, cuando por fin pude volver a ver a Silvia a Lolo y a su familia.
De esos días recuerdo a la gente, a los de las emergencias, a la policía, a los bomberos, dando lecciones de comportamiento y humanidad al mundo entero en general y a los políticos de nuestro país en particular. Pero en dos años, muchos de esos politicos han despreciado e incluso humillado a la gente que pasó por aquello simplemente porque les tocó. No han aprendido nada, pero han demostrado que siguen moviéndose bien en coches oficiales, alejados de la realidad de la gente y sin poder llegar a mirar a los ojos a esta gente. Una pena.
Un beso para Silvia, un abrazo para Lolo para sus familias y para todas las Silvias y Lolos y familias que perdieron ese día a algo o a alguien. Yo sigo con vosotros y como yo, la mayoría.